Los días festivos han llegado, y el buen ambiente y la comida típica de nuestros países no pueden faltar. Desafortunadamente, la práctica de comer rápido y en exceso, y la mezcla de muchas comidas, puede causar indigestión, inflamación e incluso flatulencia. Estos gases incomodan y pueden opacar el gozo de la fiesta. La buena noticia es que este mal puede ser corregido mediante el poder de la naturaleza, en forma de té.
Semilla de hinojo (fennel)
Esta semilla es de uso común en la cultura india. En los Estados Unidos, en varios restaurantes indios he visto las semillas en el mostrador, disponibles para los clientes después de la comida. El hinojo estimula el flujo de la bilis, lo que ayuda a la digestión. El extracto de esta semilla mejora la digestión mediante el aumento de las enzimas gástricas, y así alivia la inflamación y la flatulencia. Puedes masticar unas cuatro o cinco semillas después de tomar tus alimentos. También esta semilla ayuda a mejorar el aliento.
Jengibre (ginger)
Según el doctor Vasant Lad, quien durante quince años fue profesor de Medicina Clínica en el Colegio Universitario de Medicina Ayurvédica de la Universidad de Pune, el uso del jengibre podría ser util ante problemas de gas y flatulencias, pues durante la digestión nuestro sistema produce gases residuales. El doctor Lad sugiere rallar un poco de jengibre fresco hasta obtener alrededor de una cucharadita de pulpa, añadirle una cucharadita de jugo de limón, y tomar la mezcla inmediatamente después de la comida. Yo uso mucho el jengibre, y puedo testificar de su poder para eliminar la inflamación.
Menta (peppermint)
Aparte de dar un aporte agradable a las pastas dentales, la menta es una maravillosa hierba que ayuda a aliviar los problemas digestivos. Según el libro Healing Foods, de DK Publishing, el mentol, el aceite activo en la menta, tiene propiedades antibacterianas y antisépticas que ayudan a aliviar la indigestión y el malestar estomacal. Para disfrutarla en forma de té, pon a hervir diez hojas de menta en un litro de agua durante diez minutos. Tómate una taza de té una hora después de comer, con una o dos cucharadas de miel para endulzar.
Es probable que en estos días festivos llegues a comer en exceso, y al final puedas sentirte incómodo, con el estómago inflamado. El hinojo, el jengibre y la menta podrían ser la solución. Un té una hora después de la comida podría devolverte la calma. Pero antes de que vayas a comer, te invito a que leas este pasaje: “Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería” (S. Lucas 21:34). Si Dios inspiró al médico Lucas para recordarnos la advertencia del Señor Jesucristo acerca del peligro de la glotonería, creo que vale la pena poner atención al asunto. ¡Qué disfrutes de estos días festivos, y que el centro de la celebración sea Cristo Jesús!
El autor es nutricionista y entrenador personal. Escribe desde Seattle, Washington.
