Es probable que, así como suelen hacer muchas personas, en algún momento de tu vida te hayas propuesto alguna de estas metas: hacer más ejercicio, bajar de peso, ser más organizado, y dedicar más tiempo a tu familia. Las estadísticas revelan que un 45 por ciento de los estadounidenses se plantea nuevos objetivos cada inicio de año. Pero según el psicólogo John Norcross, de la Universidad de Scranton, solo un ocho por ciento de esas personas alcanza sus metas. Tú no tienes que ser una estadística más. Decide hoy caminar por un sendero de progreso. Tomemos, como ejemplo, que decidas adelgazar algunos kilos. Para ayudarte a empezar con el pie derecho, he aquí estos consejos útiles.
Proponte metas pequeñas
Puede ser que tengas de diez a veinte kilos (veinte a cincuenta libras) de grasa que bajar. Decide bajar cinco kilos (diez libras), lo que por lo general se logra en unas cuatro a seis semanas. Celebra tu éxito cuando hayas rebajado cinco kilos (diez libras) y prosigue con ese esquema hasta que rebajes lo que te propusiste. No te pongas metas muy altas en corto tiempo; si no las alcanzas, podrías desmoralizarte. Establece metas realistas y aumentarán tus probabilidades de superación.
Escribe tu plan
Para lograr tu propósito necesitas un plan. Conviene escribir tu menú de la semana, pues esto te ayudará a controlar lo que comes. También escribe una rutina de ejercicios físicos. Por ejemplo, cuántas veces te ejercitarás en la semana, cuánto durará tu sesión de ejercicios, dónde los harás. Procura que sea un plan sencillo, y traza el mapa que ha de llevarte al destino propuesto.
Busca un entrenador
Los atletas que quieren alcanzar sus metas saben que no pueden solos. Necesitan un entrenador que los ayude a comprometerse con sus metas, que les alumbre el camino y los mantenga enfocados en el plan. Tú puedes hacer lo mismo. Verás cuán ventajoso es tener un entrenador capacitado que te oriente y te apoye siempre.
No permitas que este año sea igual al anterior; tiene que ser mejor. Proponte obtener grandes beneficios para tu salud, y que la honra y la gloria sean para Dios. Piensa en grande, pero da pasos cortos. Escribe tus metas y elabora un plan para alcanzarlas.
Para alcanzar mis metas físicas y espirituales, no ha existido jamás un entrenador igual a Jesús. Él me ayuda en todo. ¿Quieres que 2016 sea tu mejor año? Busca a Jesús. Él será tu mejor Entrenador
El autor es nutricionista y entrenador personal. Escribe desde Seattle, Washington.