Pepe Barreto comenzó su carrera en la radio el 11 de marzo de 1963 en Lima, Perú, a los 16 años de edad. En 1967 llegó a ser corresponsal de la Voz de América. En 1972 comenzó como anunciador en Los Ángeles y desde ese entonces ha trabajado para varias emisoras como director de programas, locutor y reportero de televisión. Su programa “Pepe Barreto en la mañana”, se escuchó por varios años de 5:00 a 10:00 am por KLVE, 107,5 FM, en el área de Los Ángeles, California. Se ha ganado el respeto de la comunidad angelena por sus esfuerzos contra el cáncer y lo que hace para brindar información y apoyo al inmigrante y a favor del hogar hispano. En 2000 fue nombrado “Padre del Año” por el Concilio del Día de los Padres de Los Ángeles, y en 2003 recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, un honor reservado para personas de influencia reconocida. Actualmente puede escucharse de 3:00 a 7:00 p.m. por la estación KXOL, y verse por el canal 34, cadena Univisión, ambos en Los Ángeles. Esta entrevista ocurrió en el mes de septiembre, 2007.
EL CENTINELA–Sr. Barreto, tengo entendido que en los últimos meses usted ha encontrado un nuevo propósito dentro de sus muchas ocupaciones, que se está dedicando en lo personal a servir a Dios como miembro activo de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
¿Podría darnos una idea de cómo superó los obstáculos que una persona como usted seguramente tuvo cuando decidió seguir a Cristo?
Sr. Barreto–Yo creo que estaba escrito que yo algún día sería adventista. Recuerdo que cuando era niño solía escuchar La Voz de la Esperanza, con Braulio Pérez Marcio. Tenía siete u ocho años de edad y en ese entonces estaba en el Perú. Después seguí escuchando La Voz de la Esperanza con el Dr. Milton Peverini y últimamente con el Dr. Frank González.
Esta es una parte, nada más. Después, en mi trabajo en la radio, me tocó una compañera que siempre estaba muy concentrada en la Biblia. Esto me llamó la atención. Ella me enseñó a estudiar un poco la Biblia, cómo conocer más de la vida de Jesús. Más adelante, tuve un contador, un amigo mío, que también es adventista y fue quien me comenzó a llevar a la iglesia con más frecuencia los días sábados.
Lo que me atrajo después de la iglesia es la manera consciente, la manera seria en que se estudia la Biblia. Aprecié la manera en que la Iglesia Adventista destaca la importancia del tema de la segunda venida de Jesús en la Biblia, y el enfoque bíblico sobre el cuidado de nuestro cuerpo, nuestra alimentación, basado en que nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo. Yo ya había visitado otras iglesias a las cuales no quiero de ninguna manera ofender o menospreciar, pero puedo decir que la iglesia adventista fue con la que más me identifiqué.
EL CENTINELA–Parece que el tema de la alimentación fue un factor importante en su aceptación de una nueva manera de ver las cosas.
Sr. Barreto –Me sucedió algo interesante en la ciudad de Loma Linda, en el área de Los Ángeles. Me acerqué a un restaurante mexicano para comer, y pude notar que se destacaban los platos vegetarianos. Le pregunté a la mesera: “Oye, ¿tienen ustedes un menú especial?” Y me dice: “Sí, en esta ciudad tenemos que ofrecer comida vegetariana. Inclusive, aquí no vendemos lácteos porque nadie los compra”.
Luego investigué un poco más y aprendí que un gran porcentaje de la población de Loma Linda es adventista del séptimo día. Allí se encuentra el mundialmente famoso Centro Médico de Loma Linda. Me enteré que varias investigaciones demuestran que los adventistas de Loma Linda tienen mucho menos cáncer que la población general.
Cuando uno entiende que los principios de salud de los adventistas provienen de la Biblia, no es de extrañarse. Hasta el gobierno tiene un respeto especial por esta ciudad, ya que no se reparte el correo los sábados, lo que reconoce la observancia adventista del día de reposo.
EL CENTINELA–Otro tema que es muy importante en su vida como cristiano es la esperanza de la segunda venida de Cristo. ¿Cree usted que Jesús regresará pronto a la tierra?
Sr. Barreto–Hay muchos acontecimientos sin precedentes que nos dan qué pensar. Tenemos problemas con la capa de ozono, se habla del calentamiento global, de guerras que no terminan, de nuevas enfermedades que surgen, de epidemias que están acabando con comunidades enteras en diferentes lugares del planeta. Se habla de la lucha por la supervivencia. Faltan los alimentos, falta el empleo, las medicinas y otras cosas, pero algo que también falta es el acercamiento a Dios. Mucha gente, con tantos problemas, quizá se ha insensibilizado; o a veces cree que ha avanzado tanto la ciencia, que no necesitan de Dios.
En lo personal, le he pedido a Dios que yo nunca deje de confiar en él, de creer en él. Hay muchas personas que consideran que decir que Dios existe es una señal de debilidad.
EL CENTINELA–Hay en los libros de San Mateo, capítulo 24 y San Lucas 21, unas 175 señales cumplidas y en proceso de cumplimiento. ¿Cuál cree usted que debía ser nuestra actitud frente a estas realidades que señalan hacia la venida de Jesús?
Sr. Barreto–Pienso que debemos estar preparados, puesto que no se sabe cuándo va a regresar el Señor. Lo que no debemos dejar que ocurra es que no estemos listos, que no estemos preparados y que llegue ese día. Creo que la fecha es cercana, pero no sabemos cuán cercana.
EL CENTINELA–¿Cuán importante es, dadas estas circunstancias, que nuestro corazón esté centrado en Cristo? ¿Qué significa Cristo para usted?
Sr. Barreto–Cristo es mi Salvador, el Salvador del mundo. Cristo es mi camino a una vida eterna. Cristo es mi camino a la salvación. Cristo es todo. Antes de estudiar la Biblia, yo no alcanzaba a comprender su sacrificio, pues uno de los grandes problemas de la humanidad es que no comprendemos el sacrificio de Jesús. ¿Por qué dejó el cielo? Fue tanto su amor que vino acá a vivir como nosotros, para poder salvarnos. Cuando comprendemos eso, ahí nos damos cuenta de lo que él es, de cuánto amor nos tuvo y nos tiene y que en realidad él nos vino a enseñar cómo debe ser nuestra vida.
EL CENTINELA–¿Cómo ha afectado su vida esta nueva experiencia religiosa?
Sr. Barreto–Ahora que soy adventista me he entregado, hasta el fin de mis días aquí en este planeta y en la medida de mis posibilidades, a difundir la obra de Jesús a través de los medios en los cuales yo me he desarrollado, porque quiero que otras personas conozcan lo que yo he conocido.
Le agradezco a Dios que me está ayudando a cumplir con este propósito porque recibo invitaciones de muchas congregaciones. Me acaban de invitar de una escuela adventista pequeña, en Bellflower, para que los acompañe en un evento. También me están invitando los hermanos de la ciudad de Colton y de Duarte a que esté con ellos.
También me invitan los jóvenes para que les hable. Me encanta estar con los jóvenes, me fascina hablarles porque son vidas que se pueden moldear; mucho se puede hacer con ellos. Lamentablemente, a veces no les dedicamos suficiente tiempo. Deberíamos siempre darles más tiempo del que les damos a los jóvenes. Aprecio la oportunidad de poder hablarles y contarles mis experiencias. Me gusta que me hagan preguntas, para que no sea un monólogo.
También los pastores adventistas me han dado mucho apoyo. Agradezco a los pastores Frank González, Jorge Soria, Alejandro Bullón y otros. El pastor Jorge Soria me ha dado la oportunidad de compartir mi testimonio con muchas personas. El pastor Frank González me ha invitado a participar en los programas de televisión de La Voz de la Esperanza. También la Señora Sandra Juárez, de Esperanza TV, me ha dado la oportunidad de hablar a sus televidentes. Puedo decir con certeza que Dios ha entendido mi deseo y me está ayudando a cumplirlo y quiero que me dé más fuerzas para seguir compartiendo el mensaje de salvación.
EL CENTINELA–Hno. Barreto, a nombre de EL CENTINELA agradezco profundamente su tiempo y esfuerzo para concedernos estos momentos en favor de los lectores de nuestra revista. Que Dios lo bendiga.
(Entrevistó para EL CENTINELA el pastor Pedro Arano Molina, en Los Ángeles, California.)